La primera vez que estuvimos nos gustó por el trato, la ubicación, la tranquilidad... Incluso fueron eficientes resolviendo un problema ocasionado por la agencia de viajes que habíamos contratado. En otro viaje, escogimos este hotel de paso, porque tiene un espacioso jardín y piscina. Y esta vez ya no quedamos tan contentos, por ejemplo por el precio, que era exageradamente caro, la cena dejaba bastante que desear... No nos pareció el mismo hotel de la primera vez.