El Best Western es quizás una de las mejores opciones en Chantilly. Se encuentra ubicado en una calle céntrica, cerca de la estación (desde la que se llega en 10 minutos andando) y del castillo, el pabellón de Manse y otras atracciones de Chantilly. Creo que realmente merece la pena pasar al menos una o dos noches allí. Aunque el sitio es muy tranquilo (sobre todo entre semana), no faltan lugares interesantísimos para ver. Se puede salir también a pasear por el precioso bosque. Nosotros estuvimos en una habitación familiar que daba al jardín. Era bastante espaciosa, con grandes ventanales. El sofá cama no muy cómodo, pero suficiente. El baño grande y nuevo, aunque la bañera era muy alta, había que tener cuidado al salir (por cierto, también la taza del váter era muy alta...). Tenía un secador "de verdad". La wifi funcionaba bien, aunque te tenías que registrar para usarla, y al volverte a conectar a menudo te pedía de nuevo los datos. El personal muy amable. Sobre el desayuno buffet no puedo opinar, ya que costaba 15 euros por persona (eramos 4, 60 euros por desayunar nos pareció demasiado). Sin embargo tenían una opción que era el desayuno express: un zumo, una bebida caliente y bollería, por 6 euros. Lo tomamos en el bar junto a la recepción y estuvo muy bien. Cerca hay varios restaurantes y se puede ir andando a cualquier lugar de Chantilly. En general, mi experiencia fue positiva, lo recomiendo.