Muchas veces se quiere ahorrar algo de dinero a la hora de elegir hospedajes, pero otras veces también se busca algo lindo, cómodo y que supere nuestras expectativas. Bueno, este hotel cumplió con nuestras expectativas y mas, sobre todo por una llegada bastante accidentada a la ciudad de Seattle, por problemas con la aerolínea. La recepción estuvo muy bien, una señorita de Brasil que hablo muy buen español nos recibió y nos recomendó todo lo que podíamos hacer en esta ciudad. No todos hablaron español, pero fueron igual de amables y atentos en todo momento. La habitación estuvo muy bien, era amplia y cómoda, bastante espacio como para dejar nuestras cosas, también la ubicación de hotel. Tiene desayuno incluido, es excelente y hay variedad, pero lo que mas destaco es la wafflera, uno mismo mismo se prepara los waffles y son muy ricos, de lo mejor!! Caminando hacia el norte esta muy cerca del downtown, pier 55, public market, gum wall y otras opciones como ver o tomar un café en el primer Starbucks. No es una ciudad con un centro demasiado grande, si sigues subiendo calles al sur se puede llegar también hasta la Seattle space needle y el Kerry Park (mirador de la ciudad), solo hay algunas calles muy empinadas hasta Kerry PArk, pero es unas de la mejores formas de conocer realmente la ciudad, después se puede volver en el bus local, los recorridos son muy fáciles y se puede pagar en efectivo $2,50 (consultar precio en franjas horarias en google maps) Hacia el norte podemos llegar al distrito financiero, donde se encuentra el china town y ver los estadios de baseball y futbol americano, todo esta muy accesible realmente. Es una ciudad que se puede recorrer en tres o cuatro días como máximo y que realmente vale la pena visita.