Este Hotel a pesar de su estilo fue uno de los mejores en los que nos alojamos en nuestro viaje por los Estados Unidos, la recepción al llegar fue fantástica a pesar de su ubicación en una zona portuaria y haber llegado un sábado a la medianoche, nos consiguieron estacionamiento muy cerca a nuestras habitaciones y lo mejor de todo fue la amabilidad y la eterna sonrisa con la que nos recibió.El hotel deberia tener un mejor control sobre el estacionamiento, los fines de semana es usado por asistentes a los pubs y bares de lazna, dejando a los huéspedes sin estacionamiento La habitación estuvo impecable, limpia como un cristal, las sábanas blancas y se notaba que acababan de ser sacados de la secadora, los muebles a pesar de ser antiguos, limpios y con mantenimiento excelente. El baño con una tina donde las mayólica del enchapado brillaban de limpias, sin rastros de hongos en las juntas; las toallas impecables si bien usadas, pero olían a limpio, y la habitación ni que decir con olor a limpio. El desayuno buffet fue otra sorpresa, realmente marcó la diferencia inclusive con hoteles de Hilton y Holiday los que a pesar de pago aparte no tenian ni la calidad ni cantidad de viandas ofrecidas, tenían de todo; huevos revueltos, salchichas, jamón de pavo, papas gourmet, wafles, fruta, cafe , te , en fin un excelente desayuno buffet El checkout rapidísimo, entregan sin pedirlo el detalle de los consumos sin sorpresas ni cargos por confirmar, fue realmente un placer alojarse en este hotel Una excelente relación calidad/precio