Es un hotel extenso pues tiene muchas habitaciones, aunque solo es de 2 pisos, cuenta con varias areas donde estan los alojamientos y lo que me gustó es que tiene el estacionamiento practicamente afuera de tu habitación. Me pareció muy seguro y agradable. Cuando llegamos hicimos el check-in y la persona que nos atendió muy simpática, a pesar de que nosotros no hablamos un inglés muy fluido y ella tampoco hablaba español, pudimos hacernos entender y ella fue muy paciente. Nosotros ya llevábamos nuestra reservación on-line y todo fue sin problema. Ese mismo día tuvimos que hacer otra reserva para alguien que de último momento llegó con nosotros y Heidi (la recepcionista) nos ayudó bastante, hasta se aprendió nuestro apellido de tanto que se lo decíamos y deletreabamos, ajaja. En cuanto a nuestra habitación fue demasiado grande, tenía mucho espacio, nos tocó en 1er piso y contaba con lo necesario para estadía cómoda y agradable, agua caliente, cafetera, micro y minibar. El desayuno es en un restaruant al lado del hotel, algo sencillo pero llenador, solo puedes escoger entre huevos, cereal o hotcakes, sin embargo para nosotros fue suficiente. Sin duda recomiendo este hotel, está bonito, lástima que no pudimos utilizar la psicina pues los días que llegamos hacía frio. Espero regresar a conocer mejor la ciudad que me pareció muy bonita y si vuelvo, regresaré a este hotel.