Las habitaciones tranquilas y limpias La recepción está bien Pero demasiado ajetreo, está encima de la estación de tren central por lo cual esta céntrico a 10 min del centro. Buscaría un poco más céntrico pues está en una zona ahora de obras. El desayuno pantagruélico. Había de todo y mucho, también éramos muchos. Hotel Halmstad Es un hotel precioso, es un edificio histórico que destaca con respecto a las edificaciones más humildes de la ciudad, los interiores están muy cuidados y tienen un lujo elegante, que combina con el gran trato que ofrecen en recepción y con las habitaciones, Normalmente no me gusta quedarme en el hotel, y prefiero ver un poco la ciudad, pero su restaurante es muy buena opción, pues tienen muy buena selección de vinos, ambiente muy agradable y una gran cocina . Las habitaciones, bonitas, cómodas y limpias, confort y confort. Muy bien situado al lado de la estación de tren. Desayuno espectacular Toda la variedad imaginable de cereales, quesos, leches, mermeladas, impresionante