Este pequeño pero elegante hotel está ubicado en los alrededores de la ciudad de Nantes y está a unos escasos 10 min del aeropuerto. El trato es simplemente excelente. El personal es amabilísimo y muy solícito, presto a ayudar al huésped en todo lo que pueda necesitar. Tienen un acuerdo con taxis-furgonetas que pueden llevar pasajeros no importa la hora (avisándolo con tiempo). Hay un menú express por 15 € más que suficiente para saciar el apetito en horas en que no se encuentran restaurantes alrededor abiertos. Además, te lo suben a la habitación para mayor comidad. Se trata de comida tipo: bocadillos, mini-pizzas, helados, ensalada de frutas y todo tipo de bebidas. El taxi al aeropuerto cuesta 20 €. Internet, llamada despertador, habitaciones comodísimas (además de bonitas). Tiene un spa que no utilicé. Pero aun así, este hotel está de lujo. 85 € la noche.