Es un lindo hotel remodelado , pero buscaría alguna otra opción en Filadelfia, ya que hay muchísimos hoteles para elegir, mi habitación era grande, luminosa y limpia pero la de mi padre tenía feo olor en las alfombras y era muy oscura, me costó dormir ya que se escuchan durante la noche y muy temprano en la mañana los ruidos y voces de los demás huéspedes en los pasillos, también se escuchan los ruidos de la calle , una noche llegue de cenar y una mucama estaba a punto de entrar para desalojar mi habitación, con lo que evidentemente hubo algún problema de comunicación allí. El desayuno es común, sin nada del otro mundo, pero aceptable, para un hotel de esa categoría opino que debería ser de mejor calidad. El wifi funciona bien y el personal es amable en general ( salvo una chica en el lounge que me atendió sin muchas ganas )