Hotel muy céntrico, bien ubicado para explorar Nimes. El personal es muy amable y hablan español. Las habitaciones son bastante amplias y la cama cómoda. La habitación tiene neverita. El baño también es grande, el nuestro con bañera en lugar de ducha. El wifi iba bastante bien dentro de la habitación. No llevábamos el desayuno incluido, pero decidimos tomarlo en el hotel, ya que vimos el patio en el que se servía y era precioso. Está bien surtido, con la típica bollería, embutidos, productos lácteos, etc, pero lo encontré un poco caro.